Tiempos

[[[Imagen de Wikipedia]]]

Curioso es el tiempo, curioso es.

El pasado, los recuerdos y el acto de recordar nos inducen a la inacción, a la parsimonia, a la paralización más inútil, al desánimo.

En cambio el futuro, los sueños, los actos de imaginar y proyectar conducen a la sobreacción, a la sobreestimulación, y por consecuencia a la frustración, fruto de acciones que acaban, en la mayoría de las ocasiones, en no conquistar aquello que uno desea.

Así pues pasado y futuro se acaban por encontrar en un punto, uno y otro acaban por tener el mismo destino: la frustración, el desengaño, la desmoralización, la desesperación incluso. Este es el agujero del tiempo, ¿triste verdad?, bueno no vayan ustedes a creer que es una hipótesis confirmada, pero bueno aquí esta mi contribución científica, o mejor sea dicho pseudocientífica, al estudio del tiempo… Si Einstein levantara la cabeza… bueno no se crean (siempre creyó que cada sistema, y por tanto cada individuo tenía su propio tiempo de referencia. Y yo no voy a ser menos, yo tengo el mio, no vayan ustedes a creer), este siempre fue un tipo muy especial, guardo la ilusión de que le agradaría mi teoría; irrisoria para muchos, seguro.

No sé ustedes pero yo soy de los del futuro, es decir de los culos inquietos, para que todos nos entendamos. Es un peligro, es decir: soy un peligro para mí mismo. Vivo para y por el futuro, no hay momento que no proyecte, que no desee, que no sueñe, y que por consecuencia, no me frustre, ya saben la profana realidad dista de las ilusiones que uno genera.

De mayor quisiera ser de los del presente, de aquellos que viven plenamente el momento. Pero cuidado el presente está al alcance de muy pocos, quizás de nadie. El presente es raudo, vertiginoso, instantáneo. El presente acaba siendo pasado fugitivamente, quizás el presente no exista…sólo quizás.